La cooperación aragonesa hace balance del impacto de sus acciones durante 2020.
Más de 50 ONGD de Aragón han participado en la elaboración de un informe que ofrece una radiografía del sector de la cooperación en nuestro territorio durante el primer año de pandemia.El informe, coordinado por la Federación Aragonesa de Solidaridad, FAS, arroja información sobre los ámbitos de trabajo de las ONGD en Aragón, las personas beneficiadas, los importes, la cantidad de proyectos de educación para el desarrollo y los territorios en los que se desarrollan, describe también cómo se configura la base social de las
entidades, cuáles son los ingresos que han recibido y de qué fuentes de financiación provienen.El Informe del Sector de la Cooperación Aragonesa consta de 4 secciones que describen, a través de datos y el análisis cualitativo, el trabajo realizado por las ONGD durante el año 2020, un periodo también marcado por la crisis sanitaria derivada de la pandemia del Covid-19, que confirmó una vez más la interdependencia y el valor de la solidaridad para sostener la vida.
Incluye, además, un mapeo sobre los recursos destinados para la cooperación por país y región, lo que permite dimensionar el impacto de las ONGD a mayor escala.
Desde el punto de vista del territorio, destaca el hecho de que de las 55 ONGD participantes, la mayoría (89%) tiene su sede central ubicada en Zaragoza, mientras sólo cinco ONGD tienen ubicada su oficina en localidades fuera de la capital aragonesa. En términos económicos, Zaragoza también fue la provincia en la que se invirtió mayor importe de los proyectos de Educación para el Desarrollo (EpDCG), superando el medio millón de euros. Lo que también tiene impacto en la cantidad de personas beneficiarias: más de 71.000 personas sólo en Zaragoza.
La región del mundo con más proyectos fue Latinoamérica, donde se implementaron 114 proyectos que equivalen a más del 50% del importe total destinado a la cooperación. Los principales ejes de trabajo fueron la reducción de las desigualdades sociales; el acceso a la salud y la educación; la promoción de la igualdad efectiva entre hombres y mujeres; y el fortalecimiento a las estructuras democráticas y de la participación de los pueblos, especialmente en Nicaragua. La siguiente región con más proyectos fue África Subsahariana, con un total de 86 proyectos ejecutados en 24 países. Sin duda, el país con mayor cooperación fue Senegal, a donde se destinaron 20 proyectos ejecutados por 9 ONGD. Asia ocuparía el tercer lugar, con India como país en el que más presupuesto se ha invertido, y quedaría en último lugar Oriente Medio y Magreb.
En cuanto a la estructura de las ONGD, las dos principales figuras jurídicas bajo las que se amparan son la fundación (33%) y la asociación (62%). Y se muestra fundamental la financiación aportada por las personas socias y el trabajo voluntario que se desarrolla, ya que el 64% de las organizaciones cuenta con personas socias, con un amplio espectro que va desde 10 socias, hasta 5,515 en el caso de la organización que más reporta. Según los datos sobre ingresos del 2020, las organizaciones recibieron más de 2 millones de euros provenientes de cuotas periódicas de personas socias.
Durante el año 2020, cerca de la mitad de las organizaciones implementaron 63 proyectos de sensibilización, a través de los cuales se benefició de forma directa a más de 160.000 personas de Aragón (52% de estas mujeres). El 71% de las organizaciones participantes en el informe implementaron proyectos de cooperación en otros países. En total se ejecutaron 258 proyectos en 49 países que se desarrollaron de la mano de 207 organizaciones locales. Las acciones realizadas impactaron de forma directa la vida de 1.7 millones de personas, 52% de las cuales eran mujeres y 48% hombres.
Las entidades públicas aragonesas fueron el sector que más importe otorgó, superando los 6.9 millones de euros. Las entidades privadas fueron la segunda fuente más importante de financiación, acercándose a los 6 millones de euros, que equivalen al 41% de los ingresos globales de las ONGD. Los donantes públicos de otras comunidades autónomas, gobierno central, fondos europeos y demás administraciones, también aportan un monto importante, que supera el 1.6 millón de euros.
El respaldo a la cooperación de la sociedad aragonesa se demuestra con una sólida base social de casi 71.000 personas socias y 8.500 padrinos y madrinas a lo largo de todo el territorio. También a través del voluntariado, más de 1.500 personas participaron activamente para hacer realidad infinidad de proyectos que de otra forma serían inabarcables y hacen posible que el 40% de las organizaciones funcione sin personal contratado. También a nivel internacional 32 personas se desplazaron para colaborar en diferentes actividades por el desarrollo.
Por último, destaca también la precarización laboral de este sector. Solo el 68% de la plantilla tiene jornada completa y el restante se divide entre la jornada parcial (28%) y jornada reducida (4%). Siguen siendo las mujeres las que mayoritariamente ocupan cargos de jornada parcial o reducida, entre otras razones, por la necesidad de conciliar los cuidados con la vida laboral y por el llamado “gueto de terciopelo”, fenómeno por el cual los sectores profesionales y laborales feminizados conllevan de forma inmediata una reducción salarial y un empeoramiento de las condiciones laborales.
El informe completo se puede descargar y consultar en:
https://informesector.aragonsolidario.org